Un oasis en medio del paraiso de la Reserva de Caza de Cijara. No es el único por estos lares, pero este reune unas caracteríscticas que le hacen ser un espacio de extraordinaria calidad medioambiental.
El bosque es variado, pero predomina el roble, raro en las latitudes en que nos encontramos. Se completa con alisos, fresnos, alcornoques y quejigos.
A medida que las sierras cogen altura la tierras se rrellenan de encina y pinos.
En uno de los cruces de caminos mas importantes de la Reseva se sitúa el Refugio del Robledillo. Es una singular construcción de piedra realizada para el servicio forestal.
Tradicionamente se alojaban los ingenieros que venían a realizar algún trabajo en la Reserva. Está dotada de todas las comodidades y de casas de servicio auxiliar.
El lugar es un profundo valle del que no puedes ver donde empieza ni a donde se dirige, la sensación es estar rodeado de altas montañas que te atrapan y retienen.
La densa arboleda guarda una humedad latente hasta en los momentos mas calurosos del año. El río que corre casi todo el año está muy cerca con lo que los sonidos del monte son de lo mas variado.
Desde aquí, está señalizado el Sendero de la Muela que conduce a otro de los iconos naturales del sur de la Reserva de Cijara: Los Pilones de la Muela, de similares caracteríscticas.
Son poco mas de once kilómetros que saltan de un oasis a otro, entre sierra y bosques de pinos y encinas.
También podemos dirgirnos hacia el mirador y el puesto de observación de los bomberos. El primero está a medio camino de la sierra que corona el segundo. Dos oportunidades mas para disfrutar de este maravilloso entorno
El mirador permite contemplar la situación del valle de los Robledillos y el segundo la grandiosidad de estos espacios, que parecen no acabar nunca.
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